Viagra es un medicamento muy conocido que se utiliza principalmente para tratar la disfunción eréctil (DE) en los hombres. Está disponible desde 1998 y ha ayudado a millones de hombres a mejorar su función sexual.
El sildenafilo es el principio activo de Viagra. También se encuentra en el medicamento Revatio, que se utiliza para tratar la hipertensión pulmonar. El sildenafilo ayuda a aumentar el flujo sanguíneo al pene, lo que permite a los hombres lograr y mantener una erección durante la estimulación sexual.
Viagra pertenece a una clase de medicamentos llamados inhibidores de la fosfodiesterasa tipo 5 (PDE5). Estos medicamentos actúan ayudando a relajar los músculos y las arterias del interior del pene, lo que permite aumentar el flujo sanguíneo y mejorar la función eréctil.
La disfunción eréctil, o impotencia, es la incapacidad de conseguir o mantener una erección lo suficientemente firme como para mantener relaciones sexuales. Viagra está aprobado para el tratamiento de la disfunción eréctil en varones mayores de 18 años. El medicamento ha demostrado ser eficaz para mejorar la función eréctil en hombres con diversos problemas de salud subyacentes, como diabetes, cardiopatías e hipertensión arterial.
Viagra está aprobado para su uso en hombres mayores de 18 años. No está indicado para su uso en niños o adolescentes menores de 18 años.
El sildenafilo, principio activo de Viagra, también se utiliza para tratar la hipertensión pulmonar. Esta enfermedad se caracteriza por una presión arterial elevada en los vasos sanguíneos que conducen a los pulmones. Revatio, un medicamento que contiene sildenafilo, se prescribe para este fin y puede ser tomado por la mayoría de los adultos y niños a partir de 1 año de edad.
La mayoría de los adultos y niños mayores de 1 año pueden tomar sildenafilo para el tratamiento de la hipertensión pulmonar. Sin embargo, es esencial consultar con un profesional sanitario para determinar la dosis adecuada y asegurarse de que el medicamento es seguro para su uso en poblaciones específicas.
El sildenafilo no es adecuado para todo el mundo.
Las personas deben consultar a su médico o farmacéutico antes de tomar sildenafilo si han tenido alguna vez una reacción alérgica al sildenafilo o a cualquier otro medicamento, si están tomando nitratos para el dolor de pecho (angina de pecho) o si tienen un problema grave de corazón o hígado. Además, no deben tomar sildenafilo las personas con ciertas enfermedades oculares (como retinitis pigmentosa), anemia falciforme, leucemia, mieloma múltiple o deformidades del pene (como la enfermedad de Peyronie).
La Viagra puede interactuar con ciertos medicamentos, como los nitratos utilizados para tratar la angina de pecho. La combinación de estos medicamentos puede provocar un descenso peligroso de la tensión arterial. Es crucial comentar todos los medicamentos y suplementos con un profesional sanitario antes de empezar a tomar Viagra o cualquier otro inhibidor de la PDE5.
Las personas con problemas de salud preexistentes, como problemas cardíacos, hepáticos, derrames cerebrales o un infarto reciente, deben tener precaución al considerar el uso de Viagra. La consulta con un profesional sanitario es esencial para determinar si el medicamento es apropiado y seguro de usar.
Es fundamental consultar con un profesional sanitario antes de utilizar Viagra o cualquier otro medicamento para la disfunción eréctil o la hipertensión pulmonar. Tanto el Viagra como el sildenafilo genérico requieren receta médica, que puede obtenerse en persona o en línea a través de los servicios de telesalud. Siga siempre los consejos de su profesional sanitario para garantizar un uso seguro y eficaz de estos medicamentos.