Definición y características de la disfunción eréctil grave

La disfunción eréctil, a menudo denominada impotencia, se caracteriza principalmente por la dificultad para conseguir y mantener una erección. Esencialmente, es la incapacidad persistente de mantener una erección adecuada para un rendimiento sexual satisfactorio. Para muchos puede resultar difícil hablar de este tema, teniendo en cuenta su naturaleza íntima y la vergüenza que puede causar.

Prevalencia e impacto

La disfunción eréctil no es un problema médico raro.

Los estudios epidemiológicos han señalado que aproximadamente el 10% de los hombres de entre 40 y 70 años padecen formas graves de esta afección. Además, alrededor del 10% de las personas diagnosticadas de disfunción eréctil se clasifican en la categoría de disfunción eréctil grave. En estas personas, la afección está tan avanzada que no pueden lograr y mantener una erección lo suficientemente fuerte como para la penetración sexual, lo que les impide mantener relaciones sexuales.

Características clave de la disfunción eréctil grave

Hay varias características que distinguen a la disfunción eréctil grave:

• Incapacidad prolongada para lograr una erección, incluso cuando se estimula sexualmente.
• Dificultad constante para mantener una erección el tiempo suficiente para completar la relación sexual.
• La aparición de estos problemas en más del 50% de los intentos de actividad sexual suele ser un indicador de un problema que requiere atención médica.

La influencia del estilo de vida

Aparte de los problemas físicos y psicológicos inherentes a la disfunción eréctil, ciertas elecciones de estilo de vida pueden agravar el problema. Aunque las opciones de estilo de vida como dejar de fumar o reducir el consumo de alcohol pueden aliviar a veces las formas más leves de disfunción eréctil, no siempre tienen un efecto significativo en la disfunción eréctil grave. Además, el estrés, la ansiedad y la baja autoestima pueden contribuir al ciclo, impidiendo aún más el rendimiento sexual normal.

Buscar ayuda profesional

Es fundamental reconocer los signos de disfunción eréctil y buscar ayuda. Es importante consultar a un médico si le preocupa la calidad de sus erecciones o si tiene otros problemas sexuales. Sobre todo si estos problemas van acompañados de otros síntomas o de enfermedades conocidas, como diabetes o cardiopatías. Por ejemplo, el priapismo, una afección en la que la erección dura más de cuatro horas y es extremadamente dolorosa, es una forma grave de disfunción eréctil que puede provocar daños permanentes en el pene si no se trata inmediatamente.

Además, la Clínica Cleveland ha calculado que se considera normal tener dificultades para conseguir o mantener una erección hasta en un 20% de los encuentros sexuales. Sin embargo, si surgen dificultades en más del 50 por ciento de los intentos, es indicativo de un problema médico más acuciante.

La disfunción eréctil dispone de varias opciones de tratamiento, y algunas de ellas incluso eliminan la necesidad de tomar una píldora. Por lo tanto, es imprescindible acudir a un profesional médico para comentar los síntomas y obtener un diagnóstico preciso.